El grupo municipal del PP recuerda que la movilidad es una competencia exclusiva del municipio y los problemas de aparcamiento afectan a toda la ciudad.
El grupo municipal del PP de Lugo desmiente las acusaciones del BNG sobre la apertura de aparcamientos y recuerda su disposición para colaborar con el Ayuntamiento.
El modelo de movilidad impulsado por el BNG genera atascos, elimina plazas de aparcamiento y perjudica a los vecinos y al comercio local en la ciudad.
La concejala, Mar Carballas, recordó la carta que el delegado de la Xunta de Galicia, Javier Arias, trasladó formalmente a la alcaldesa, Paula Alvarellos, el pasado 9 de diciembre, en la que ofrecía la firma de un convenio para regular el uso de estos aparcamientos fuera del horario lectivo, y en la que subrayaba que es imprescindible plasmar por escrito las condiciones de utilización y las responsabilidades que asume cada parte, con el objetivo de garantizar la seguridad jurídica y el buen funcionamiento de la medida. Por lo tanto, si no están abiertos hoy, es por culpa de la Alcaldesa y de su Concejal de Movilidad, Rubén Arroxo.
El PP reitera que es necesario un cambio en las políticas de movilidad que Rubén Arroxo lleva aplicando desde que está en el gobierno. “Pretender que abrir los aparcamientos de los institutos resuelva los problemas de aparcamiento en Lugo es hacer demagogia y simplificar un problema mucho más profundo. Las acusaciones del BNG son un intento descarado de desviar la atención de sus propios errores de gestión en el Ayuntamiento”, señaló Carballas.
El modelo de movilidad del BNG: más problemas y menos soluciones
Desde el PP ya se ha denunciado que el modelo de movilidad impulsado por el BNG está provocando graves problemas en Lugo. La peatonalización desordenada, la reducción de plazas de aparcamiento y la falta de alternativas efectivas han generado una situación de caos en la ciudad, perjudicando tanto a los vecinos como al tejido comercial.
“El BNG está aplicando medidas sin planificación ni diálogo con los sectores afectados. Las peatonalizaciones pueden ser positivas, pero no pueden llevarse a cabo a costa de colapsar el tráfico, eliminar aparcamientos y crear más problemas de los que se resuelven. Esta es la realidad que hoy sufren los lucenses”, explicó la concejala.
El PP apuesta por el consenso y las soluciones prácticas
“El BNG debería asumir la responsabilidad de gobernar en beneficio de la ciudad y no aprovechar los problemas que ellos mismos generan para hacer oposición a la Xunta”, concluyó Mar Carballas.